sábado, 15 de noviembre de 2014

EL COLOR DEL OTOÑO



  • ¿Por qué las hojas cambian de color en otoño?

  • Se nota que acaba el verano porque hay que llevar chaqueta para salir a la calle y el cielo está nublado. Las hojas de los árboles comienzan a amarillear y a caer al suelo, crujientes y resecas. Y allí donde conviven los árboles de hoja perenne y los de hoja caduca, la cúpula de los árboles se convierte en el capricho de un pintor con buen ojo para los matices verdes, amarillos, naranjas, ocres y rojos vivos.

  • Al igual que la luz del sol no es igual de intensa ni tiene el mismo color en todas partes, por ejemplo en la copa de un árbol, en las profundidades del bosque o en una ciudad brumosa, las hojas de las plantas tampoco pueden serlo "si quieren" aprovecharla al máximo. Por eso acumulan distintos pigmentos y las hojas tienen colores muy variados. Pero entonces, ¿a qué se deben los cambios de color?

  • Las hojas suelen ser verdes todo el año porque acumulan clorofila, un pigmento que se encuentra en el interior de los cloroplastos. Estos son un componente de las células vegetales que participa en el proceso de aprovechar la energía del sol para transformar el dióxido de carbono del aire y el agua del suelo en azúcares aprovechables por la planta. Gracias a estos azúcares las plantas pueden crecer y costearse su funcionamiento y en el camino producen un residuo fundamental para la vida, el oxígeno. Todo este proceso se conoce como fotosíntesis, así lo publicaABC.es.

  • La producción de clorofila requiere temperaturas cálidas y luz solar. Cuando llega el otoño y los días se hacen más cortos, la cantidad de luz disminuye y por eso la producción de este pigmento también decrece. Como resultado, las hojas de las plantas de hoja caduca, pierden su coloración verdosa en otoño.


 
  • Además de clorofila, las hojas tienen unos pigmentos conocidos como carotenoides y flavonoides, que pueden darle a las hojas sus colores amarillos, naranjas y rojos. Entre ellos destacan los beta-carotenos, que le dan el color naranja a las zanahorias, la luteína, que le da el color amarillo a las yemas de huevo, y el licopeno, que le da el color rojo a los tomates.

  • Los colores de estos pigmentos suelen pasar desapercibidos en las hojas porque la clorofila los enmascara durante el verano. Pero cuando llega el otoño, tanto las clorofilas como los carotenoides y flavonoides se degradan, pero los pigmentos verdes lo hacen más rápidamente. Por ello, las hojas se ponen amarillentas, anaranjadas o rojizas.El hecho de que los pigmentos tengan diferentes colores se debe a que esas moléculas tienen distintas capacidades para absorber la luz. Cada uno de ellos es capaz de absorber y de hacer rebotar una parte distinta de los rayos de luz.


  • Cuando la luz que rebota desde las hojas llega al ojo, se produce una sensación de color distinta en función de cómo haya absorbido la hoja esta energía. Tanto es así, que se puede decir que el color de las hojas es básicamente una sensación construida por el sistema nervioso cuando traduce la radiación electromagnética que rebota desde las hojas hasta los ojos.

  • Los matices de color dependen de la naturaleza de la radiación y sus longitudes de onda: dentro de cierto espectro, las longitudes de onda cortas se perciben como colores azules y las más largas como rojizas. En el caso del sonido, las longitudes de onda cortas corresponden a sonidos agudos y las largas, a sonidos graves.

jueves, 12 de junio de 2014

EL COLOR DE LAS TORMENTAS




Las tormentas siempre han llamado la atención  al ser humano, tanto por sus efectos en superficie (tornado, lluvias intensas, granizo, rayos, etc), como por sus variadas formas y colores.  A veces, cuando observamos el ciclo de vida de una tormenta podemos ver sus distintas fases en periodos relativamente cortos delante de nuestros ojos.
Los intensos desarrollos convectivos pueden ocupar grandes proporciones de la troposfera y en muchos casos llegan a alcanzar a la tropopausa (12-16 km de altura). El espesor de estas nubes es tal que en los atardeceres y amaneceres las tormentas pueden estar diferencialmente iluminadas. Las partes altas aparecen blanquecinas-rojizas y la parte baja toma tonalidades grises. La iluminación puntual e instantánea generada por un rayo, externo o interno a ella, puede provocar otra gama de colores que nos puede llamar poderosamente la atención.
En determinadas ocasiones el color de la tormenta se torna en un verde llamativo, a veces azulado-verdoso o tras veces amarillento-verdoso. Se han observado focos convectivos que mostraban dichas tonalidades durante al menos una hora. En esos momentos estamos en la llamada fase de la tormenta verde. En algunas ocasiones, testigos directos han observado la presencia de fuertes granizadas e incluso de tornados en los momentos de adquirir dicho color. Se pensaba que la tonalidad verdosa estaba ligada a una llamada de atención de la tormenta o a una fase especialmente severa. Otras informaciones, por el contrario, no han observado que el cambio de color llevara asociado ningún efecto en superficie de tipo adverso. Durante un tiempo estuvieron encontradas ambas ideas sobre la presencia, nada común de este tipo de cambio de colorido en algunas tormentas.
La tormenta verde se ganó la reputación de una ser una amenaza o una señal que la Naturaleza enviaba de que aquella perturbación convectiva podría ser peligrosa: el mito de la tormenta  verde  había comenzado.
Recientemente han salido a la luz varios trabajos científicos sobre el origen, las causas y los efectos potenciales que pueden generar en superficie.  Uno de ellos es el llevado a cabo por Frank Gallagher III que ha estudiado en EEUU la presencia del color verde o verdoso en muchas tormentas dentro de proyectos científicos más amplios (VORTEX).
Para ello se ha valido de un aparato que realiza un análisis de la luz enviada directa o indirecta  por distintos focos luminosos. Este aparato se le denomina espectrofotómetro. Junto observaciones de campo, pruebas de laboratorios y experimentos numéricos, Gallagher ha conseguido descifrar parte del mito de la tormenta verde. Pero como afirma él: queda mucho más por aprender sobre la tormenta verde de lo que es conocido.
Espectrofotómetro para estudios de campo de medidas y análisis de la luz.
Vaya por delante, y repetimos una vez más, que se han observado tormentas en su fase verde que no han generado ningún fenómeno significativo adverso en superficie y que, por otra parte, tormentas con tornados y granizo de gran tamaño no han pasado por la fase de color verdoso. Por lo tanto, en mito de tormenta verde-señal adversa  o de amenaza totalmente está descartado.
La mayoría de las teorías actuales confirman que las tormentas verdes son  producidas por un efecto óptico generado por la interacción de la luz solar directa o indirecta que reciben las nubes convectivas y los procesos de absorción, dispersión y atenuación que afectan a las señales luminosas que alcanzan a un observador cuando las contempla.  Esta señal luminosa tan especial solo se puede apreciar en determinados momentos y en condiciones especiales. Repasemos las teorías que se han desarrollado para explicar el colorido verdoso de algunas estructuras convectivas.
Algunos focos convectivos profundos pueden tomar tonalidades verdes en ciertas fases de su ciclo de vida, como la observada en la fotografía. Fuente y crédito: FloridaLightning.com 
La  teoría de la Reflexión
La primera teoría, o más bien creencia popular sin base científica alguna,  se basaba  que el color verde de una tormenta se producía al pasar esta por campos cultivados con tonalidades verdes. La tormenta reflejaba  parte de la señal que provenía de la vegetación del suelo. Esta teoría ha sido descartada totalmente. Se han observado tormentas que han llegado a dar tonos verdes cuando estas se encontraban sobre zonas no dedicadas a cultivos, desérticas, etc. Por otra parte, medidas espectrales de la luz proveniente de la nube y de la zona  vegetal cultivada que se encontraban debajo de la tormenta han demostrado que los análisis luminosos de ambos focos no tenían nada que ver uno con otro.
Tormenta verde-azulada fotografiada por Ribera-Met con arcus incluido al pasar por unos sembrados verdes. Fuente Foro de Meteored.
Teoría del fondo de gotas oscuras (black backdrop theory)
Algunos autores sugieren que el color verde no proviene de la propia tormenta sino del propio aire que se encuentra entre el observador y la tormenta. La nube tormentosa hace de fondo y el color que vemos asociado a la tormenta es simplemente un efecto óptico del aire que existe entre el observador y la tormenta.
La base de esta teoría se encuentra en que la atmósfera dispersa mejor las longitudes de onda  corta (azul) que las largas (rojo-amarilla). Por este motivo el cielo es azul durante gran parte del día. Para mayor detalle ver los artículos de la RAM, “Mirando al cielo: fenómenos ópticos atmosféricos”.
De acuerdo con esta teoría, la luz de la tarde (cuando las tormentas se desarrollan preferentemente y mucho antes de los atardeceres), llega a tener tonalidades azuladas y en menor medida verdosa, pero a la vez las longitudes de onda azules son parcialmente eliminadas por lo que la tonalidad alcanzada en azul-verdosa.
Cuando esta luz nos alcanza teniendo como fondo o enmascarada por un fondo oscuro tormentoso entonces se produce un efecto en el que la luz que le llega al observador es más brillante ganando en intensidad las tonalidades azul-verdosa.
Tormeta verde fotografiada por Ribera-Met. Fuente Foro de Meteored.
En resumen, esta teoría sostiene que la luz dispersa por el aire que hay entre el observador y la tormenta hace que la tormenta que sirve de fondo tome tonalidades azul-verdosa.  No es en si la tormenta la que irradia dichas tonalidades sino el aire interpuesto entre ella y nosotros.
Esta teoría esta abalada por ciertas tormentas distantes que han aparecido verdosas a ciertos observadores. Por contra no explica la presencia de tormentas verdes observadas de cerca  o dentro de ellas. Esta teoría queda en parte en entredicho por estos últimos comentarios.
Las tormentas como filtros ópticos atmosféricos
Otra teoría supone que las tormentas se comportan como verdaderos filtros ópticos al ser atravesadas por la luz directa o indirecta de otras tormentas.
El efecto de la aparición del color verde en ciertas tormentas a las vespertinas, pero antes del atardecer, se debe a que la luz azulada que proviene del cielo y que atraviesa una tormenta pierde por absorción los colores de longitudes mas larga (rojo-amarillo).  Lo que emana de esta tormenta-filtro es una luz rica en colores de onda azul-verdoso.
Es la abundancia de gotitas de agua e hielo las que potencialmente generan este efecto de filtrado. Estamos frente a filtros naturales de longitudes de onda corta.  Para que esto ocurra las cantidades de agua en la nube deben ser relativamente altas.
Muchos factores influyen en el color de los focos convectivos: posición del sol, del observador, espesor de la nube, composición y concentración de las partículas, etc.
Vemos el efecto luminoso de la tormenta verde se debe a propiedades y concentraciones de agua que nos hablan de al microfísica de la nube, no existiendo relación con la presencia o no de tornados, granizo, rayos, etc…
Los modelos numéricos a escala de nube, que recrean estas tormentas al atardecer con la luz solar apropiada, han puesto de manifiesto que esta teoría es la más verosímil. Se necesitan grandes espesores de nubes convectivas para generar tonalidades verdosas en la tormenta resultante. Pero aún más, cuando se varía el tamaño de las gotitas las tonalidades pasan del azul-verde al amarillo-verde.  Ninguna tonalidad verde emana de la nube modelizada cuando sólo se predice la presencia de granizo. Cuando se reduce el espesor de la nube modelizada, sólo con concentraciones de gotitas pequeñas se pueden producir emanaciones verdosas, no así cuando las gotitas son grandes o existe granizo embebido en la nube.
Estas modelizaciones numéricas y las medidas espectrofotométricas indican que las tormentas verdes provienen directamente de la nube y no del aire circundante. La presencia de tormentas con tonalidades verdes está íntimamente ligada a las concentraciones de gotitas nubosas y el espesor de la nube en relación con la trayectoria de la luz que la tiene que atravesar. La amenaza verde no es tal.
Aunque se ha avanzado mucho en el conocimiento de las tormentas verdes, falta mucho por conocer:
¿Cuál el la distribución ideal de gotitas para que se den tormentas verdes?
¿En qué momento del ciclo de vida de una tormenta aparecen las tonalidades verdes?
¿Puede la tonalidad o color de una tormenta ser usado como índice o elemento indicativo de la severidad de una tormenta?
Muchas preguntas sin responder están todavía detrás de las espectaculares tormentas verdes.
En conclusión
Las tormentas verdes no tienen porque estar asociadas siempre a fenómenos convectivos adversos. Su colorido se debe a una interacción de la luz solar con las estructuras propias de la tormenta (gotitas de agua, cristalitos de hielo, etc.). Por si solo el granizo no puede crear las tonalidades verdosas observadas. Por lo tanto, una tormenta  de color verde no se debe tomar como señal unívoca de presencia de granizo en superficie.
La absorción de la luz al atravesar a una tormenta puede generar este colorido que estamos analizando.
Las tormentas en general pueden crear en alguna fase de su ciclo de vida esas tonalidades tan llamativas, pero como dice el autor al que nos referimos, el observador debe estar en el momento correcto y en el sitio exacto para ver dichas singularidades rojo-verdosas o azulado-verdosas.
De cualquier forma, si ve una tormenta con tonalidades verdes, azules o de cualquier otro color muy activa y acercándose, entonces busque refugio.
Referencias
- Craig F. Bohren and Alistair B. Fraser , 1993: Green Thunderstorms.,. Bulletin of the American Meteorological Society Volume 74, Number 11,  pages 2185–2194.
http://ams.allenpress.com/amsonline/?request=get-pdf&file=i1520-0477-074-11-2185.pdf
- Gallagher, F.W., III, 2001: Ground Reflections and Green Thunderstorms.
J. Appl. Meteor., 40, 776-782.
- Gallagher, F.W., III, and K. Cutlip, 2001: The Green Menace. Weatherwise,
54(3), 24-31.
Más información técnica en:
Información de: http://www.tiempo.com/ram/5762/las-tormentas-verdes-¿una-amenaza-real-o-un-capricho-ptico-de-la-naturaleza/

viernes, 23 de mayo de 2014

EL COLOR DEL ACEITE DE OLIVA






El color del aceite de oliva varía de verde claro a oscuro al amarillo oscuro o claro. El color está determinado por la sustancia de color dominante de la fruta durante la cosecha. Si te encuentras un aceite de oliva verde, has de saber que la fruta fue recogida muy temprano. 


El aceite por lo general tiene un sabor amargo. La técnica de extracción del aceite también juega un papel importante en la determinación del color.La técnica de extracción del aceite también juega un papel importante en la determinación del color.El aceite de oliva también puede tener un color verde intenso, si las hojas o las ramas de los olivos se han añadido durante la molienda. 
Una fruta verde o semi-madura resultara en la aparición de la clorofila azul-violeta. 
El aceite de oliva amarillo significa que el fruto ha madurado antes de ser cosechado. Si el amarillo es vivo, esto puede ser el efecto de la oxidación. Cuando el color es marrón oscuro o negro, el aceite procede de aceitunas que han caído de las ramas del árbol. Esta especie de aceite tiene un sabor más ligero, más dulce. Bibliografía: http://es.secretos.aceite.oliva.acomerya.com/


 La cata del aceite de oliva constituye una verdadera especialidad. Los catadores, mediante la vista, el olfato, el gusto y el tacto, son capaces de distinguir sus calidades y variedades. Las características organolépticas del aceite de oliva, como son color, olor y sabor, dependen esencialmente de los componentes presentes en la aceituna, que se extraen junto con el aceite que los contiene, y que vienen determinados por el clima y el suelo de cultivo, por la variedad de la aceituna, y por las técnicas de cultivo, recolección, extracción y envasado.     A pesar de que el color no influye en la valoración de los profesionales de la cata, las tonalidades varían del amarillo pálido al verde menta. Los tonos amarillo-dorados corresponden a aceites dulces provenientes de aceitunas de recolección tardía, y los destellos oscuro-verdosos a olivas que al no haber completado su periodo de maduración generan líquidos afrutados y algo amargos. El sabor está condicionado, parcialmente por el grado de maduración de los frutos.


     Los aceites se catan templados, aspirando sus olores y "masticando" sus sabores como si se tratara de vinos de reserva. Los aceites vírgenes extra no deben tener defectos: nada de regustos metálicos, toques sucios ni sensaciones de bastedad o enranciamiento. Solo fruta en estado puro.

Bibliografía: http://www.oleohispana.com/aceite.htm



martes, 28 de enero de 2014

DE QUÉ COLOR ES UN SENTIMIENTO




El color también se siente cuando uno ama, sufre, teme......¿¿ de qué color es cada uno de esos sentimientos??....cierra los ojos y piénsalo...


POEMAS DE AMOR

¿De qué color es un sentimiento?
La respuesta esta en el silencio
en contemplarte y mirarte
en saber que existes
en poder pensarte
en anochecer soñándote
un sentimiento es amor
pero sin color
sólo el color que tiene el sentirte
.

http://poemasdeamor.org/poemas8.htm
Un sentimiento es del color de las nubes
que mojan mi cuerpo en noches de frío,
para adornar el momento en que una musa;
anheló ser feliz conmigo.
Un sentimiento es del color de tus ojos
que brillan cuando estoy perdido
en la riqueza de tus encantos;
igual que a un chiquillo.
Un sentimiento es del color de tus labios
que me enseñan a encontrar el camino,
por donde un día caminamos juntos;
y Dios fue nuestro testigo.
Un sentimiento es del color de las flores
que adornan los espacios entre tú y yo,
que nos indican construir amores;
cuando despierta la luz del sol.


Lee todo en: Poema ¿DE QUE COLOR ES UN SENTIMIENTO?, de neruda, en Poemas del Alma http://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-66582#ixzz2rib4Ynwz



EL COLOR DEL MIEDO




El miedo es nauseabundo... 

negruzco... 
pardi-negro... 

oscuro, lacerante, maloliente, 
estúpidamente negro... 

El miedo es esa baba putrefacta 
que escurre de las fauces de los celos... 

El miedo paraliza, el miedo escapa 
a las más simples comprensiones... 

El miedo es ese humo 
que sale del cigarro 
de los que no quieren contemplar el mundo... 

El miedo es amargura, es desazón, 
 

Y se encamina a veces por mil rumbos... 

El miedo es esa niña 
a la que su mamá enterró viva en el fondo de un pozo... 

El miedo es espantoso... 

El miedo es del color de nuestras lágrimas... 
Las más oscuras, y las más amargas... 

Las que lloramos cuando hemos perdido 
personas, o momentos o lugares, 
y sólo queda apretar las manos, 
cerrando los dos puños ante el aire... 

Prefiero arrepentirme de lo hecho, 
que tener que llorar por no atreverme... 

El miedo, sabes? sólo es un desecho... 
cuando aprendas a amar, ya no lo guardes...





He encontrado una relación de palabras de emociones que asociamos con colores...¿¿ estás de acuerdo con ellas ??





A
acción – marrón
alegría – rosa, plateado, verde

amanecer – rosa


amenaza – violeta


amor (divino) – violeta


amor (físico) – rojo, naranja


amor (humano) – rojo


autoridad – negro


B


beligerancia – rojo, naranja


belleza (divina) – amarillo


belleza (humana) – verde


C


calor (atmosférico) – marrón


calor (interior) – rojo, naranja


camaradería – verde


caos – violeta


cariño – púrpura


carne – rosa


compañerismo – marrón


comprensión – amarillo


constancia – azul


cumplimiento – rojo


D


dedicación – violeta


demonio – rojo


deporte – marrón


desenfado – marrón


devoción, piedad – violeta


dignidad – púrpura


distinción – amarillo


dolor, pena, aflicción, sufrimiento – negro


dominio – rojo, naranja


E


emociones humanas – rojo


encanto, magia – violeta


enojo – rojo, naranja


envidia – verde


esperanza – verde


espiritualdiad – azul, violeta


estima – amarillo


excelencia – amarillo


excitación – rojo


F


fe – azul


fertilidad – marrón


fidelidad – azul


fiebre – rojo, naranja


frío – azul


frugalidad – púrpura


fuego – amarillo


fuerza (de ánimo) – rojo, naranja


fuerza (física) – marrón


furia – rojo, naranja


G


gourmet – marrón


grandiosidad – violeta


H


honor – azul


hortalizas – rojo, naranja


humildad – azul, negro


I
ilustración, cultura – amarillo


inmaterialidad – azul


inmortalidad – azul


inocencia – plateado, blanco


intangible – azul


inteligencia – amarillo


intimidad – rosa


introversión – azul


J


jocosidad, travesura, guasa – amarillo


L


la nada – azul


lealtad – negro


luto – azul, negro


M


madurez – marrón


masculinidad – marrón


matanzas – rojo, naranja


melancolía – azul, violeta


muerte – negro, violenta


O


ocio – verde


opresión – violeta


oro – amarillo


otoño – marrón


P


pasión – rojo, naranja


pasividad – azul


pesar, pena, dolor – negro


poder – azul, negro


premio – azul


productividad – verde


proximidad de una catástrofe – violeta


pureza – blanco, amarillo



R


radiante, resplandeciente, brillante – amarillo


real – negro


recesión – azul


S


sabiduría – plateado


sacrificio – rojo, naranja


salud – verde


santidad – blanco


satisfacción – verde


servical (servicio doméstico) – negro


sexo – rosa



soledad – violeta


sombras – azul


superstición – violeta


T


ternura, afecto, delicadeza – azul


terror – azul, violeta



tregua – blanco


tristeza – azul, negro


triunfo – rojo, naranja


V


valentía – rojo, naranja


valorar (económicamente) – amarillo


verdad – azul


verduras – verde


victoria – rojo, naranja


vida eterna – verde


virilidad – marrón



http://www.color-es.net/psicologia-del-color/significado-de-los-colores.html


La verdad es que yo no estoy de acuerdo en muchas de ellas...ponen la ternura en azul y yo le pondría un tono rosa claro, la verdad azul...yo la veo blanca....la vida eterna....no sé....es una recopilación que he encontrado pero muchas de ellas las veo de otros colores...